Monday, May 15, 2023
Antes de empezar, siento que debo dejar algo muy claro: amo absolutamente a Ellen. Llevamos viviendo juntos unos tres años ahora, pero nos conocemos desde que éramos niños. De hecho, éramos amigos de la infancia, y sé que esto puede sonar como un cuento de hadas para algunas personas, pero realmente sentiamos que estábamos destinados a estar juntos. Incluso después de graduarnos, cuando empezamos a salir con otras personas, sólo nos sentíamos verdaderamente bien cuando estábamos juntos. Así que no sé por qué tardé tanto en invitarla a salir, pero estoy muy contento de haberlo hecho.
Tenemos el mismo gusto en música, películas e incluso comida. Nos reímos de las mismas bromas tontas y sabemos exactamente cómo reconfortarnos en momentos de necesidad. Ella es la chica más amable, gentil y amorosa que he conocido. Incluso hemos estado hablando de nuestros planes para casarnos y de cómo nos gustaría tener nuestros propios hijos. Por eso duele tanto que todo haya salido tan mal, y en solo cuatro noches.
También quiero aclarar que Ellen no tiene mucha familia aparte de mí y algunas tías muy lejanas que nunca conoció y ni siquiera sabe sus nombres. Yo nací en una familia grande, con cuatro hermanos y muchos primos que siempre estaban de visita, e incluso ayudando cuando teníamos problemas. Ellen no tiene nada de eso. No tiene hermanos y su padre era un alcohólico abusivo que murió cuando ella era joven. Su madre era una persona muy amable e inspiradora que se encargó de la familia por sí misma durante muchos años. Y casi una segunda madre para mí. Así que cuando falleció el año pasado, nos dolió a ambos durante mucho tiempo.
Pero Ellen se mantuvo fuerte. No es del tipo que deja sus sentimientos salir fácilmente a la superficie, así que hay que ser muy perceptivo para entender lo que realmente siente. Solía enorgullecerme de ser capaz de hacerlo. Sentía que la conocía mejor que a mí mismo. Por eso todo esto es tan extraño y francamente aterrador.
Estábamos durmiendo en la cama, y yo estaba soñando. Realmente no recuerdo de qué se trataba, pero por alguna razón estoy seguro de eso. Hasta que escuché su voz, muy cerca de mi oído:
”Toc, toc. Toc, toc.”
Ella estaba acariciando mi cabello suavemente mientras se sentaba en la cama y me miraba desde abajo.
Abrí lentamente los ojos, adormilado.
”Oye… ¿qué pasa, cariño?”
Ella siguió mirándome, fijamente. Y repitió:
”Toc, toc. Toc, toc.”
Miré el reloj digital en la cómoda. Eran las 3:27 AM. Tenía que ir a trabajar en unas pocas horas.
”¿Qué pasa, Ellen?”
Ella hizo una pausa. - ”Por favor, responde el chiste, querido. Toc, toc. Toc, toc.”
”Está bien.” - Acepté, principalmente porque esperaba alguna especie de sorpresa. Ellen no era del tipo que hacía lo que estaba haciendo sin razon alguna.- “Quien anda ahi?“.
Su sonrisa se abrió y ella respondió: “No yo. Así que no contestes la puerta”.
Seguí mirándola atónito. ¿Qué se suponía que significaba eso?
“¿Eso es todo? ¿Ese es el chiste?”
“Sí”, dijo, acostándose en el sofá y cubriéndose con una manta. “Gracias por responder”.
“Raro”, respondí, cerrando los ojos y volviendo a dormir.
A la mañana siguiente, todo transcurrió con normalidad. Sólo recordé la extraña conversación cuando estaba solo en el baño, cepillándome los dientes, y ni siquiera estaba seguro de si había sucedido realmente o si era sólo un sueño extraño. Así que desayunamos juntos, y ella actuaba con normalidad, leyendo en voz alta algo de una revista de moda. Francamente, no presté mucha atención. Así que aproveché la oportunidad para preguntar sobre la noche anterior.
Inicialmente, ella no parecía saber de qué estaba hablando. Luego sus ojos se fijaron en mí y la misma sonrisa de anoche cruzó su rostro brevemente. Y supe que no era sólo un sueño. Me dijo que no era nada importante, y dejó de prestar atención cuando pregunté más inquisitivamente. Y aunque no debería, me rendí. Tenía trabajo y otras cosas que atender, y simplemente dejé pasar el extraño evento pensando que no volvería a suceder.
Pero la noche siguiente, desperté a su voz.
“Toc, toc.” - Una pausa. - “Toc”.
“¿Qué pasa ahora?” - Dije. - “Ellen, ¿qué estás haciendo?”
“Toc, toc. Toc.” - Repitió.
Esta vez, ni siquiera me estaba tocando. Solo sentada en la cama, mirándome con esa misma sonrisa. Pero sus ojos parecían más grandes y parpadeaba en intervalos más largos. Miré el reloj. Una vez más, las 3:27 AM.
“Ellen, vamos. ¿Qué pasa? Tengo trabajo en unas pocas horas, no puedo darme el lujo de despertar en medio de la noche para responder a los chistes de Toc Toc”.
“Toc, toc. Toc.”
“Esto está dando miedo, ¿sabes? No estoy seguro de si esto es alguna broma que has estado haciendo, pero no me gusta.”
“Respóndelo. Toc, toc. Toc.”
Suspiré, pero también dejé escapar una pequeña risa. Era espeluznante, por supuesto, pero ella también era mi Ellen. Así que no me molestó tanto como debería haberlo hecho.
“De acuerdo. ¿Quién demonios está ahí?” - Respondí en tono juguetón.
“No yo. Así que no respondas la puerta.”
Por alguna razón, sentí un escalofrío por mi espalda. Era la misma respuesta que antes, y aún no entendía lo que significaba. Pero la forma en que lo dijo, con una extraña voz monocorde, contrastaba bien con su sonrisa y el hecho de que no tenía idea de lo que quería decir.
“¿Qué significa eso?” - Pregunté. - “Realmente no lo entiendo.”
Ella solo sonrió y volvió a dormir. Sentí un latido en mi corazón, pero hice lo mismo.
Al día siguiente, hablamos de nuevo sobre lo que estaba sucediendo. Ella evadió mucho mis preguntas, y apenas conseguí sacarle algo. Era como si no pudiera hablar del tema, lo cual era muy extraño considerando que hablamos de prácticamente todo. Le dije que necesitaba estar bien descansado para el trabajo, algo que ella debería entender bien, y que no me gustaba su pequeña broma cada noche. Ella solo asintió. Y decidí no presionar más, ya que no quería herir sus sentimientos y tenía trabajo que atender.
Cuando volví a casa, cenamos, vimos una película y fuimos a la cama.
“¿Quién es?”
Abrí los ojos más rápido esta vez. De hecho, apenas dormí - solo sabía que ella lo haría de nuevo y estuve pensando en eso todo el tiempo. Miré el reloj: 3:27 AM.
“¿Quién es?”
Pensé en ignorarla. Solo fingir que estaba dormido y que no me despertaría. Así que cerré los ojos lentamente, esperando que ella no me hubiera visto abrirlos en primer lugar, y me quedé callado.
“¿Quién es?”
Ella continuó. No se detuvo. Regulé mi respiración, pero ella seguía.
“¿Quién es?”
“No voy a responder tu maldita broma, Ellen. Detente”.
“¿Quién es?”
La ignoré, pero ella siguió. Nunca había sido tan insistente con nada antes. Intenté ignorarlo, pero me estaba poniendo nervioso, y francamente, me sentía asustado. ¿Por qué Ellen estaba haciendo esto? ¿Por qué todas las noches, a la misma hora exacta hasta el minuto? ¿Por qué no me dejaba dormir hasta que le respondiera?
”Toc Toc”
Me levanté de un movimiento brusco.
”Maldita sea, Ellen.” - Estaba listo para discutir, pero cuando finalmente la miré, era como si la fuerza se me hubiera escapado.
No estaba sonriendo. No estaba parpadeando. Simplemente me miraba fijamente, como un animal. Y su boca se movía lentamente, y no paraba. ”Toc Toc”.
No sabía cómo reaccionar, ni qué expresión tenía cuando la vi, pero mi corazón dio un vuelco. Era aterrador, como si su mirada me hubiera congelado en el lugar. Una mirada perdida.
”Toc Toc”
”¿Quién está ahí?” - Pregunté, sintiendo como si fuera la única forma de salir de esa pesadilla.
”No yo. Así que no abras la puerta” - Dijo, débilmente.
Ellen cerró lentamente los ojos y se acostó. Yo seguía mirándola mientras caía en lo que parecía ser un sueño profundo.
Me levanté y me fui. Bajé las escaleras y me senté en el sofá de la sala, mirando el cielo nocturno afuera y absorbiendo el silencio del vecindario. Mi corazón latía rápido y no se detenía. Tenía demasiado miedo de dormir en la misma habitación que mi novia, todo por una maldita broma de Toc Toc. Pero era antinatural. Pensé en llamar a alguien. Pensé en que todo esto era algún tipo de problema relacionado con el sueño, como sonambulismo. Pero no tenía sentido.
Estaba muy cansado. Y decidí que temprano en la mañana llamaría a un viejo amigo que es psicólogo y obtener la opinión de un profesional. Algo estaba mal con Ellen.
Me quedé en el sofá mientras amanecía el día, y una vez que Ellen se despertó, actuó de manera normal de nuevo. Incluso me preguntó por qué no estaba en la cama. No respondí. De hecho, no hablé con ella y simplemente me fui a trabajar. Parecía muy molesta, pero no iba a hacer nada al respecto. Una vez en el trabajo, llamé a mi amigo, le conté todo lo que estaba sucediendo en tanto detalle como lo estoy describiendo ahora. No parecía tan preocupado como pensé, pero acordamos hacer una cita para la próxima semana. Ahora solo necesitaba convencer a Ellen de que viniera conmigo.
Recibí muchos mensajes de texto de ella. Parecía muy preocupada, triste e incluso confundida. Se disculpó mucho, y eso me rompió un poco el corazón. Me sentí mal. No debería haberlo hecho, pero le respondí, y la hice prometer que no volvería a suceder. También le hablé de la cita, y parecía reacia pero aceptó venir conmigo. Así que nos reconciliamos.
Esto era Ellen, después de todo. La chica que conocí desde que tenía seis años. La mujer que amaba y que había cuidado de mí durante años. Y por más que su extraño comportamiento me asustara, no estaba haciendo nada particularmente aterrador, ni siquiera peligroso. Así que por un breve tiempo, me convencí a mí mismo de que debería darle otra oportunidad.
Cuando regresé a casa del trabajo, nos quedamos juntos. Incluso preparó mi comida favorita. Ellen actuaba tan gentil y cuidadosa como siempre recordaba, y dormí con ella en nuestra habitación, aunque todavía estaba un poco renuente.
”Toc Toc”
No podía creerlo. Me prometió que no lo haría.
”Toc Toc”
Miré el reloj. 3:27 AM. Siempre.
”Toc Toc”
Estaba acostado boca abajo y no podía ver su rostro. De hecho, ni siquiera me molesté en mirarla. En ese momento, me sentía más triste que asustado. Triste de que ella hubiera roto su palabra.
”¿Quién está ahí?” - Respondí, decidido a volver a dormir.
”No soy yo. Así que no abras la puerta.”
Me quedé callado y cerré los ojos. Solo esperaba poder manejarlo hasta la cita de la próxima semana.
Para mi sorpresa, en realidad pude dormir. Probablemente porque no había podido descansar desde la noche anterior. A la mañana siguiente, volví a no decir nada a Ellen, solo respuestas muy limitadas. Esperaba que actuara igual que ayer, tratando de disculparse, pero no lo hizo. Mayormente no dijo nada, casi como si lo hubiera aceptado. También parecía cansada, o al menos un poco débil.
Fui al trabajo, pero no podía dejar de pensar en ella. Tampoco recibí ningún mensaje. Una vez que volví, tuvimos la cena más silenciosa que jamás haya tenido en mi vida. Y ella apenas comió nada.
Decidí dejarle la habitación y dormir en el sofá. No estaba seguro de si eso la detendría, pero me aferré a la esperanza de que no bajaría solo para contarme el mismo chiste de Knock Knock de nuevo. Me cubrí con una manta, sacudí esa sensación incómoda e intenté dormir.
Tuve un sueño profundo, sin sueños. Sentía como si estuviera perdido en la oscuridad. Luego escuché respiración.
Abrí los ojos para ver a Ellen, parada sobre mí, mirándome con ojos grandes y fijos y pupilas dilatadas que no parecían pertenecer a una expresión completamente neutral. Observándome dormir.
Casi grito de terror. Salté del sofá, y sus ojos me siguieron mientras tropezaba por la habitación oscura, creando distancia entre nosotros. Por un momento pude ver el reloj sobre la mesa: 3:27 AM.
”Ellen, ¿qué estás haciendo?!” - pregunté, desesperado. Pero ella no se movió.
De hecho, no dijo nada. Solo me miró fijamente, como si fuera de cristal y pudiera ver a través de mí.
Luego escuché un golpe en la puerta principal.
Instintivamente, miré en esa dirección. Fue seguido por otro golpe. Y otro. Alguien casi golpeando la puerta.
Miré de reojo a Ellen, y ella aún me miraba fijamente. Lentamente me acerqué a la puerta y ella no se movió. Los golpes continuaron.
”¿Quién está ahí?!” - grité.
Se detuvo. Y luego, escuché una voz.
”¿John? ¿John, puedes escucharme? ¡Abre la puerta, por favor! ¡John, por favor, abre la puerta!”
Me quedé paralizado. La voz seguía llamándome. Pero no podía creerlo. Era la voz de Ellen, viniendo desde el otro lado de la puerta. Pero no podía ser.
”¡Te lo ruego, John! ¡Abre la puerta, es grave! ¡No soy yo, lo juro! ¡Ella no soy yo!”
Lentamente giré mi cabeza para mirar a Ellen, parada frente al sofá. Me miraba con los mismos ojos fijos y una terrible y amplia sonrisa en su rostro.
Los golpes continuaron. ”¡John, abre la puerta! ¡Por favor, tienes que confiar en mí!”
Me quedé quieto, sin saber qué hacer. Y no recuerdo qué sucedió después de eso.
Solo desperté en mi habitación. El reloj digital indica que son las 4:21 AM. Ellen no está a mi lado, estoy completamente solo. Estoy temblando, incontrolablemente, y no sé qué está sucediendo. No recuerdo qué sucedió después de ver su terrible mueca. No sé si abrí la puerta.
Intenté buscar mi teléfono para llamar a la policía o al menos a alguien que conozca, pero lo dejé abajo. Todo lo que tengo es la computadora portátil de Ellen, y es donde estoy escribiendo esto ahora para obtener consejo. Porque no puedo bajar las escaleras. El pasillo está oscuro, muy oscuro, casi como si las sombras se estuvieran inclinando hacia la habitación. Y puedo escuchar un sonido de rasguño apenas perceptible que viene de abajo.
¿Qué debo hacer?